Prevención y Promoción de la Salud

Encuesta: efectos psicosociales y cognitivos del confinamiento

OBJETIVO

Detectar las necesidades de las personas mayores de 65 años para poner en valor su capacidad para superar las dificultades asociadas al confinamiento prolongado a través de sus propios testimonios y poder hacer recomendaciones ajustadas que ayuden al colectivo.

El cuestionario online, que ha recibido 2.602 respuestas, se ha difundido en Catalunya, el resto de España, Andorra, Francia y Sudamérica. Hacer accesible la encuesta a personas mayores sin acceso a la tecnología o con dificultades para responderla fue posible gracias al apoyo de entidades colaboradoras y voluntarios por vía telefónica.

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RESULTADOS DEL ANÁLISIS PRELIMINAR (29 ABRIL 2020)

En el análisis preliminar de las respuestas de 1129 personas, se observa:

- un 68,9% son mujeres;
- predominan los estudios superiores (53,1%);
- la media de edad es de 71,3 años;
- un 51.4% convive con otra persona en el domicilio;
- y un 24.2% vive solo este confinamiento.

Los primeros resultados indican la percepción de empeoramiento de algunos aspectos cognitivos debido al confinamiento como:

- la orientación - por ejemplo, a la hora de situarse en la fecha del mes o en el día de la semana -;
- la atención durante la realización de tareas cotidianas como leer;
- encontrar la palabara adecuada a la hora de hablar;
- realizar tareas de planificación y/o cambiar de una tarea a otra o hacer de forma más lenta algunas tareas (como leer, calcular, etc).

Asimismo, los datos muestran que hay una proporción pequeña de personas afectadas por pérdidas de memoria, pero en el área de los aspectos psicosociales los efectos en el ámbito emocional son los que de momento se ven más acusados.

RESULTADOS: RESUMEN FINAL (29 JULIO 2020)

Mantenimiento de los aspectos cognitivos

A nivel cognitivo, el 76% de los participantes ha considerado que al menos un aspecto, como por ejemplo la orientación, la planificación y la rapidez al realizar tareas o la atención y la concentración, se ha visto afectado de alguna manera, a pesar de que solo un 11% se sitúa en la parte alta (“mucho” o “bastante”). Tener más de 80 años y una educación elemental son factores de riesgo para sufrirlos, así como ser mujer en el caso de la memoria. La situación de convivencia no parece ser un factor relevante.

El sentido del humor contra la ansiedad, la soledad o la tristeza

De los aspectos psicosociales, los problemas del estado de ánimo son los que más personas han afectado en este periodo de confinamiento. El 83% de los participantes ha referido sufrirlos frecuentemente, ya fuera ansiedad, soledad o tristeza, como consecuencia de las restricciones, o por no poder estar con los seres queridos. También han indicado miedo por su salud o por no poder hacer frente de manera positiva el confinamiento si se alargara mucho más tiempo. Ser mujer y tener un bajo nivel educativo son los principales factores de riesgo para experimentar alguna afectación del estado de ánimo.

Aun así, según se extrae de los resultados, en general, las personas mayores han afrontado la situación de manera positiva, con ganas de estar al día sobre la epidemia, colaborar con otras personas y utilizando el sentido del humor para hacer frente a la situación: un 70% de los participantes ha manifestado haberlo usado para adaptarse.

La soledad, el gran enemigo

El perfil de convivencia, especialmente vivir sol/a, es el principal factor de riesgo en las personas que han indicado haber experimentado soledad, junto con un bajo nivel educativo, ser mujer y mayor de 80 años. La probabilidad de disfrutar de contacto con otras personas que no sean familiares aumenta en los participantes que tienen estudios universitarios y en el colectivo de personas menores de 75 años.

Metodología y resultados

Llevada a cabo durante la fase de confinamiento más estricta y el primer periodo de la desescalada (del 21/04/2020 al 10/06/2020), tenía por objetivo evaluar los impactos percibidos por las personas mayores en la esfera cognitiva y psicosocial debido al confinamiento, teniendo en cuenta las diferencias por edad, género y nivel educativo. El cuestionario online fue difundido a través de redes sociales y la participación fue voluntaria, anónima y confidencial. Se han analizado los datos de 2.010 respuestas de participantes de 65 años o más que refieren vivir en Cataluña.

Esta acción de Fundació Salut i Envelliment UAB ha sido dirigida por las investigadoras Sara Domènech y Laura Coll, y el análisis general de resultados ha sido elaborado por Xavier Rojano.

Acceder al resumen completo de los resultados de la encuesta (en catalán)