Consejos de Salud y Prevención: la gestión del estrés a través del mindfulness
El mindfulness o "conciencia plena" es una forma de meditación que, en el plano laboral, contribuye a disminuir el estrés y favorece la creación de hábitos de trabajo, una mayor capacidad de concentración y una mejor gestión de las situaciones estresantes.
02/04/2024
Parar un momento para reflexionar y practicar pequeños ejercicios de mindfulness a diario ayuda a estar más enfocado, comunicar mejor y ser más creativo.
Una carga de trabajo excesiva, la sensación de carencia de tiempo, la multitasca o la exigencia, son algunos de los factores que generan, en muchas personas, ansiedad y estrés laboral. Nos encontramos en un entorno en cambio continuo, de exceso de información y que avanza a un ritmo vertiginoso, lo que somete a nuestro cerebro a una sobreexposición permanente que, a menudo, no puede gestionar adecuadamente.
En este contexto, se hace necesario introducir nuevas estrategias que nos ayuden a hacer frente a los efectos negativos del día a día y a vivir de manera más relajada.
El mindfulness en la gestión del estrés laboral
Una de estas técnicas es el mindfulness, una forma de meditación que integra las enseñanzas de Buda en Oriente junto con las investigaciones científicas de Occidente, y que puede traducirse como "conciencia plena" o "atención plena". El mindfulness parte de la idea de que nuestra mente genera pensamientos constantes de forma automática e inconsciente, y que vivimos en una realidad inundada de estímulos que dispersan nuestra atención y nos hacen olvidarnos de nosotros mismos.
Beneficios del mindfulness
Esta técnica aporta numerosos beneficios a quien lo aplica en su día a día. Además de ayudar al desarrollo de habilidades para gestionar el estrés, permite trabajar mejor las emociones. Contribuye a tener un estado físico y emocional más óptimo y a mejorar la capacidad cognitiva y el razonamiento verbal. También permite que la persona, en lugar de reaccionar, responda adecuadamente ante determinadas situaciones. En el plano laboral, favorece la creación de hábitos de trabajo, una mayor capacidad de concentración, la creatividad y una mejor gestión de las situaciones estresantes.
La práctica del mindfulness también comporta aspectos muy positivos para las organizaciones. Así, ayuda a reducir el absentismo laboral, gracias a la disminución del estrés, el agotamiento mental y la ansiedad de los trabajadores; reduce el número de conflictos al permitir relativizar los juicios de valor y los perjuicios mentales, y mejora el trabajo en equipo.
Como aplicar el mindfulness en el trabajo
Las siguientes técnicas sencillas ayudan a aumentar el bienestar, a trabajar mejor y a reducir la tensión del día a día al trabajo:
- Centrarse en una tarea
Prestar atención al 100% a aquello que se está haciendo. Una manera de trabajar más conscientemente es llevar a cabo una sola actividad a la vez. A menudo, la multitasca no nos hace más productivos, sino que causa el efecto contrario y puede generar estrés. Es importante procurar ignorar los correos electrónicos u otros posibles distractores, como mínimo durante periodos cortos de tiempos que se hayan establecido previamente.
- Aprovechar las pausas
Cuando se termine una tarea es conveniente hacer una pausa. Con un minuto hay bastante. Durante los descansos, no se debe dedicar el tiempo a mirar el móvil o los correos electrónicos. Mejor intentar cerrar los ojos, relajar los hombros y concentrarse en las sensaciones. Hacer unas cuántas respiraciones profundas y volver lentamente al trabajo.
- Dar una pequeña vuelta
Si se tiene la posibilidad, es bueno salir a pasear después de comer y andar durante un cuarto de hora por un lugar con pocas distracciones y lo más alejado posible del ruido, concentrarse en el ritmo de los pasos y en la sensación de los pies, la velocidad y el ritmo, intentando coordinarlo con la respiración.
- Relajarse y comprobar la respiración
La respiración es una de las mejores herramientas para gestionar el estrés. Los ejercicios de respiración conscientes ayudan a calmar y a desestresar en situaciones complicadas. No hay que dedicarle mucho de tiempo, pero sí estar concentrados, escuchar al cuerpo (en silencio, si es posible) y mantener una buena higiene postural (espalda recta), de forma que se pueda liberar la mente del trabajo por unos instantes.
- Comprometerse con el mindfulness
A menudo, el ritmo ajetreado hace que olvidemos practicar el mindfulness. Añadir recordatorios a la agenda, poner una nota adhesiva en la pantalla del ordenador o alarmas en el móvil, ayudan a recordar que hay que dedicarle pequeños momentos del día. Poco a poco, estas acciones se convertirán en un hábito.
Formación en gestión del estrés a la Corporación UAB
El pasado mas de marzo se llevaron a cabo dos ediciones del curso “Vivir sin estrés”, una formación de 6 horas sobre la gestión del estrés basada en el mindfulness para acompañar a las personas a disfrutar de una vida más consciente y creativa, impulsando la salud emocional y el bienestar. A finales de abril está prevista una tercera edición en linea.
Para más información, contactad con formacio.personal.fuab@uab.cat.