Comentarios en torno a un primer Think tank
Archivística y Gestión de Documentos – Escuela FUAB Formación celebró el pasado junio el primer Think tank, un acontecimiento bienal que acerca la Universidad al mundo de la empresa. En tres tablas de debate se reflexionó sobre la importancia de la formación, de la investigación y de las soft skills en el ámbito profesional de la Archivística. Los asistentes disfrutaron, además, de un espacio de networking.
01/07/2024
La jornada se desarrolló en la Sala de Revistas de la Biblioteca de Humanidades de la UAB, y reunió empresas del sector, profesionales y miembro de la comunidad universitaria. Tres tablas de debate y un espacio de networking posibilitaron contactos, transmisión de conocimiento, análisis y reflexión sobre el sector.
El balance: muy positivo, según Joan Pérez Ventayol, actual director de Archivística y Gestión de Documentos. El mensaje recibido de las empresas de este primer Think tank fue muy favorable a su participación, puesto que “necesitaban ser escuchadas por una institución de prestigio como es la Universitat Autònoma de Barcelona”. La comunidad universitaria y los profesionales del sector respondieron a la iniciativa con su asistencia, que logró unos sesenta participantes.
“Hace tiempo que la Escuela tenía como proyecto estratégico hacer una vinculación entre los ámbitos de la universidad y la empresa. Vincular los puestos de trabajo, los proyectos, la investigación y los estudios, para conocer las inquietudes de las empresas y darles respuesta desde este ámbito académico”, afirma el director de Archivística y Gestión de Documentos.
Esto lo hemos traducido en dos acciones: la primera, el Workshop que organizamos el año pasado, y la segunda, este Think tank centrado en la investigación, la formación y las soft skills. No queríamos que fuera un espacio meramente académico, sino de relación directa entre los ponentes y los asistentes, además de un lugar donde las empresas podían recibir los estudiantes y las personas interesadas.
“El resultado lo valoramos muy positivamente: gente interesada e interacción entre los dos ámbitos. Se han podido sentir las voces de las empresas y del público, con una fuerte calidad de las intervenciones por parte de todo el mundo. Estamos realmente contentos porque las aportaciones a las tablas de debate han sido muy enriquecedoras”, concluye Pérez Ventayol.
Otras voces participantes
Para Ana de la Rosa Castro, técnica en comunicación de archivo, preservación y gestión documental a la empresa ODILO, este es su “primer Think tank y la es verdad que me ha gustado mucho el formato y me he sentido muy cómodo como poniente".
En ODILO, nosotros tenemos puestos de trabajo específicos para llevar el software de archivos y gestión con el cual trabajamos, ya que son trabajos importantes y requerimos suficiente gente para poder desarrollar todas las tareas y necesidades que nos piden los clientes.
Rafel Roig, socio de la firma de consultoría AGTIC Consulting SL y profesor afirma que el Think tank “me ha parecido un espacio muy productivo, puesto que ayuda al hecho que los alumnos puedan entender que, más allá de la universidad y los conocimientos que se les puede dar desde aquí, se pueden hacer más cosas y hay más requisitos para tener en cuenta. Me ha parecido muy interesante la última mesa que hablaba de las soft skills. Se tiene que trasladar a los alumnos que, aunque tengan muy buena nota a escala técnica de todo el que han aprendido, también tienen otra carrera a recorrer en este camino de las soft skills”.
En cuanto a la recerca, Rafel Roig piensa que “se tiene que dar la visión de que la recerca también se puede hacer en un entorno empresarial y que los estudiantes pueden tener también esta salida. Y espacios como estos facilitan la confluencia entre el mundo didáctico y el mundo práctico, ayudando a los alumnos a poder ver qué viene después de acabar los estudios, que valoran las empresas y que los hace falta, tanto como trabajadores o como investigadores”.
Para Mariona Fernández, estudiante de la Escuela FUAB Formación, “el Think tank ha sido una iniciativa fascinante, tanto por la asistencia de empresas como por los profesionales, que nos ha puesto en contacto y ha fomentado debates sobre cuestiones que no te habían pasado antes por la cabeza, o que pueden darle una vuelta diferente a cosas que te habías planteado”.
En el ámbito de la archivística, en cuanto a las soft skills, “hay que destacar la necesidad de mejorar la proactividad. Hay problemáticas del día a día que tenemos que salir adelante y esto solo se puede hacer con una actitud proactiva”, afirma Mariona Fernández.
“Parece que los archiveros seamos una profesión cerrada, que trabajamos en archivos cogiendo polvo, y la realidad es que es todo el contrario. Tenemos muy candente el tema de las nuevas tecnologías, la inteligencia artificial y como operaremos con estos nuevos sistemas", concluyó.
