Itinerario rojo-Can Domènec

Al inicio del itinerario la vegetación está muy atada a la acción antrópica y presenta el aspecto de mosaicos de diferentes formaciones vegetales: desde pinares plantados hasta prados secos, pasando por malezas con arbustos como la retama y el romero, entre otros.
Una de las comunidades vegetales más arraigadas en el territorio es el bosque mediterráneo. Se observan sobre todo bosques mixtos de pino carrasco y encina con un gran número de arbustos y lianas característicos del encinar mediterráneo, como la aladierna, el durillo, el espino blanco, la esparraguera, el rusco, el torvisco, la rogeta (espécie de liana herbácea), la zarzaparrilla, la hiedra y la madreselva.

A lo largo del recorrido se pasa a través de cultivos y frutales que evidencian el pasado agrícola de los terrenos. La mayoría de estos campos de cultivo han sido recuperados y actualmente están cultivados y gestionado por el Servicio de Granjas y Campos Experimentales.
El itinerario también nos permite ver restos de antiguas masías, como las ruinas de la antigua masía Casa Isidre, en torno a la cual todavía se conservan algunas plantas ornamentales y frutales. Entre los campos también se pueden ver restos de la masía Can Domènec, que da nombre en el valle.
 

La segunda parte del camino transcurre paralelo en el torrente de Can Domènec; se puede ver un magnífico bosque de ribera y se pueden encontrar especias como el chopo y el álamo, el roble pubescente (o roble "peludo"), el roble cerrioides, el plátano, el olmo y el avellano. En estos ambientes es fácil observar pájaros como el herrerillo azul, la piqueta verde, el petirrojo y el gorrión, común en casi todos los hábitats del entorno de la UAB.

En la parte final del itinerario, en los alrededores de la fuente del Carme, la vegetación de ribera presenta además una alameda y también equisetos o colas de caballo.
 

En la parte final del itinerario se encuentra la fuente del Carme, uno de los lugares más singulares de Can Domènec. La fuente está rodeada de una arboleda fresca con especias típicas de ambientes húmedos. Fue construida hacia los años sesenta y tuvo un papel sociológico y de ocio importante hasta los años ochenta entre los vecinos de las poblaciones próximas, que venían a disfrutar del entorno natural.

Al lado de la fuente del Carme hay un majestuoso roble (Quercus cerrioides) de una edad aproximada de 130 años y de unos 22 metros de altura. Situado en un entorno privilegiado, en la glera del torrente de Can Domènec y al lado de la fuente del Carme, este roble es uno de los ejemplares más antiguos y majestuosos del campus de la UAB.