Creado un videojuego para personas con discapacidad intelectual
"Hace tres años comenzamos a utilizar las tecnologías de la información y la comunicación en las actividades que organizamos con nuestros usuarios y nos dimos cuenta de que había un hueco en el mercado de contenido formativo y lúdico para nuestro colectivo. Así surgió la idea de crear un producto nuevo, que se adaptara específicamente ", explica Xavier Martínez Biosca, director de CIPO.
El resultado es CIPOActivity, un videojuego para potenciar el bienestar físico y emocional de personas con diferentes grados de discapacidad intelectual y trastornos mentales y de edades diversas, desarrollado por investigadores del CAIAC -Centro de Accesibilidad y IntelEligència Ambiental de la UAB- , en colaboración con los expertos de psicología de CIPO. El proyecto ha recibido el apoyo de la convocatoria de "Promoción de la autonomía y la atención a la discapacidad ya la dependencia, del programa de Ayudas a Proyectos de Iniciativas Sociales de la Obra Social" la Caixa ".
El videojuego cumple los requisitos terapéuticos fijados por los especialistas y tiene a la vez los componentes educativo y lúdico de cualquier juego serio. "A nivel técnico, hemos marcado un ritmo algo más lento en el desarrollo de los acontecimientos, de manera que los estímulos no sean tan rápidos y el jugador pueda reaccionar más fácilmente. Hemos tenido presente que las instrucciones fueran sencillas y comprensibles y hemos ajustado los umbrales de detección de movimiento a la mayor sensibilidad posible; así, el sistema da puntuación a pequeños gestos intencionados que no cuentan en un juego convencional ", comenta Enric Martín, investigador del CAIAC que ha coordinado el proyecto.
De coreografías aeróbicas a ejercicios de relajación
CIPOActivity utiliza el dispositivo Kinect, que permite al usuario jugar sólo con el movimiento del cuerpo, y comprende cuatro juegos: de música, de colores, de relajación y "el bosque de los juegos", que incluye cuatro minijuegos. El jugador debe superar diferentes pruebas frente una pantalla, un ordenador y el dispositivo Kinect, guiado, en algunas de las actividades, por una monitora virtual. Para el diseño y la animación de los personajes se ha utilizado un programa de diseño y modelado 3D y la música de los juegos también ha sido compuesta expresamente. El videojuego permite jugar en catalán, castellano o inglés.
"Todos los juegos tienen un componente físico, pero paralelamente hemos querido trabajar diversas habilidades para estimular otras áreas y funciones cognitivas", comenta Aurora Piguillem, psicóloga de CIPO que ha participado en el diseño del videojuego.
Las propuestas van desde el aprendizaje y desarrollo de coreografías aeróbicas y ejercicios de gimnasia hasta prácticas de relajación, y trabajan diferentes capacidades cognitivas y motoras, como la atención y la concentración, el equilibrio, la memoria, la coordinación, la flexibilidad, la respiración, la visualización o la estimulación sensorial.
"Las puntuaciones y los resultados nunca son desmotivadores y siempre animan al jugador a seguir adelante o volver a intentarlo. Además, llevamos un registro de las puntuaciones de cada jugador, para hacer un seguimiento objetivo de su evolución ", añade Aurora Piguillem.
Un prototipo del videojuego se está utilizando ya en las instalaciones de CIPO, con muy buena aceptación por parte de los usuarios. En un futuro cercano, CIPO quiere hacer difusión, para que lo puedan utilizar otros centros y particulares. "Pensamos ya en la posibilidad de ampliar niveles y escenarios o de desarrollar otros proyectos dentro del campo juegos serios, ya que todavía hay repertorio", concluye Xavier Martínez Biosca.
El desarrollo del videojuego ha contado también con la participación de la empresa Kaneda Games. En total hay colaborado una quincena de investigadores, diseñadores y psicólogos.
