El acceso a la universidad sigue dependiendo del apoyo familiar
La Red Vives de Universidades ha presentado los resultados del informe Vía Universitaria: Acceso, condiciones de aprendizaje, expectativas y retornos de los estudios universitarios (2020-2022), en los que han participado cerca de 50.000 estudiantes de 20 universidades de Cataluña, la Comunidad Valenciana, las Islas Baleares y Andorra. En esta tercera edición se analiza por primera vez el impacto de la crisis sanitaria en los estudios.
- Sólo 1 de cada 10 estudiantes proviene de clase social baja.
- Las mujeres son mayoría en la universidad (64%) pero su presencia en Ingenierías y Ciencias es aún minoritaria.
- Uno de cada cuatro estudiantes asegura haber sufrido ansiedad en los 12 meses centrales de la pandemia.
El estudio Vía Universitaria: Acceso, condiciones de aprendizaje, expectativas y retornos de los estudios universitarios (2020-2022) analiza las condiciones de vida de los estudiantes, sus formas de estudiar, su vinculación con la universidad, sus hábitos culturales , los condicionantes económicos, así como sus expectativas, valores y creencias en relación con la educación superior.
En esta tercera edición se analiza por primera vez el impacto de la crisis sanitaria en los estudios. El informe ha sido presentado el martes, 24 de mayo, por la dirección científica y técnica del estudio en la Universidad de Barcelona.
La universidad se estanca en el avance hacia la equidad
Sólo 1 de cada 10 estudiantes proviene de clase social baja, según el informe Vía Universitaria (2020-2022) de la Xarxa Vives. De esta forma, la clase social predominante en la universidad es la clase alta: el 58,5 % en los grados y el 60,9 % en los másteres. Los resultados de Vía Universitaria muestran que la clase social baja es la menos representada: supone sólo el 9,1% del estudiantado. El sistema universitario está todavía lejos de la equidad y queda mucho camino por recorrer en este objetivo.
Por áreas de conocimiento, los estudiantes que provienen de un entorno familiar con nivel formativo bajo están más representados en las ramas académicas de Ciencias Sociales y Jurídicas (22,5 %) y Humanidades (21,3 %), que en Ingenierías (15,6%), Ciencias (13,7%) y Titulaciones Mixtas (10,3%).
El apoyo familiar, esencial para poder estudiar en la universidad
Los datos del estudio que ha hecho público la Red Vives de Universidades muestran que los progenitores son los principales financiadores de los estudios superiores. Así, las familias son los máximos financiadores de los gastos globales de los estudios (54% de los gastos). Este dato también está plenamente relacionado con la vivienda, puesto que 6 de cada 10 estudiantes de grado viven con las familias durante su etapa universitaria. Los resultados de Vía Universitaria muestran cómo el acceso a la universidad no comporta una emancipación de la casa parental.
Las carreras reproducen las desigualdades de género
En cuanto al género, las mujeres son mayoría en la universidad (64%) pero su presencia es todavía minoritaria en las Ingenierías (36,5%) y las Ciencias Experimentales y Matemáticas (39,3%). Las mujeres se orientan hacia las áreas de salud y cuidados, artísticas y educativas, mientras que los hombres hacia las que tienen que ver con los espacios de poder y toma de decisiones. Cabe destacar que precisamente los ámbitos de conocimiento tradicionalmente más masculinizados suelen tener mayores salidas laborales, prestigio social o un sueldo más elevado.
Los resultados del informe de la Red Vives también constatan que las estudiantes se esfuerzan mucho más en responder a las exigencias académicas, especialmente en carreras masculinizadas, donde están minoría. Son más disciplinadas y constantes en el estudio. El análisis en términos de brecha de tiempo dibuja una realidad en la que las mujeres se dedican más a los trabajos de casa y cuidados en el ámbito familiar, mientras que los hombres dedican más horas a sus aficiones personales y a hacer vida social.
1 de cada 4 estudiantes ha sufrido ansiedad en los 12 meses centrales de la pandemia
Por primera vez, el informe Vía Universitaria ha incorporado preguntas relacionadas con la salud mental y el bienestar emocional. Siguiendo las definiciones de la Encuesta Europea de Salud, se ha preguntado a los estudiantes si han sufrido ansiedad crónica o ningún otro problema de salud mental. Un 22,8% de los estudiantes universitarios asegura haber sufrido ansiedad y un 26,4% declara haber sufrido depresión en alguna ocasión. Esto explica cómo la pandemia ha afectado notablemente a la salud mental de los estudiantes, especialmente durante el período 2020-2021.
El informe también señala cómo las metodologías docentes tradicionales han perdido peso, mientras que se ha incrementado la presencia de metodologías más activas e innovadoras. En relación con la enseñanza a distancia, 4 de cada 10 estudiantes valora positivamente el esfuerzo de las universidades por adaptarse a la situación provocada por la pandemia y el trabajo de los docentes.
Se consolidan las diferencias entre los estudiantes de universidad presencial y virtual
Otra de las tendencias que se confirma en esta tercera oleada tiene que ver con el perfil general de los estudiantes. Así, se constata que en las universidades presenciales siguen siendo mayoritarios los estudiantes de perfil convencional: jóvenes, acceden a través de las PAU y sin responsabilidades familiares. Mientras que en la universidad virtual aumenta el perfil de estudiantes mayores, con otras vías de acceso y con cargas laborales y familiares. De esta forma, la universidad virtual actuaría también como un dispositivo de segunda oportunidad para perfiles y trayectorias más complejas.
Vía Universitaria: el estudio sobre los estudiantes más importante de la región Pirineo-Mediterráneo
La finalidad del programa Vía Universitaria es conocer el perfil del estudiantado universitario, sus condiciones de estudio, la satisfacción con la docencia y la vinculación con la universidad. El estudio de la Red Vives de Universidades recoge datos sobre las trayectorias del estudiantado desde una triple perspectiva: la equidad en el acceso y vida en los estudios superiores; la transformación de la realidad de los estudiantes como resultado de un entorno social cada vez más diverso; y la calidad de las metodologías de enseñanza y aprendizaje. Así, Vía Universitaria se alinea con los resultados del informe EUROSTUDENT, que recoge la misma información en 28 países europeos.
La tercera edición de Vía Universitaria está impulsada por las universidades Abat Oliba CEU, Alicante, Andorra, Autónoma de Barcelona, Barcelona, CEU Cardenal Herrera, Girona, Islas Baleares, Internacional de Cataluña, Jaume I, Lleida, Miguel Hernández de Elche, Abierta de Cataluña, Politécnica de Cataluña, Politécnica de Valencia, Pompeu Fabra, Ramon Llull, Rovira i Virgili, Valencia y Vic Central de Cataluña. La Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Cataluña (AQU) asume la dirección técnica. El programa también cuenta con el apoyo de la Agencia de Calidad de la Enseñanza Superior de Andorra (AQUA), de la Agencia Valenciana de Evaluación y Prospectiva (AVAP) y de la Generalidad de Cataluña.
Dirección científica:
- Antonio Ariño Villarroya, Catedrático de Sociología de la Universidad de Valencia.
- Ramon Llopis Goig, catedrático de Sociología de la Universidad de Valencia.
- Miquel Martínez Martín, Catedrático de Teoría de la Educación de la Universidad de Barcelona.
- Ernest Pons Fanals, profesor titular de Economía de la Universidad de Barcelona.
Dirección técnica:
- Anna Prades Nebot, jefe del Área de Internacionalización y Generación del Conocimiento de AQU Catalunya.
- Daniel Torrents Vila, gestor de proyectos del Área de Internacionalización y Generación del Conocimiento de AQU Catalunya
La UAB, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible
- Paz, justicia e instituciones sólidas
- Educación de calidad