El proyecto Hedera, una iniciativa para romper barreras de acceso a la universidad

Cartell del projecte Hedera

El proyecto Hedera es una iniciativa de Fundesplai, y consiste en crear una red de mentorías para acompañar a jóvenes en su camino hacia la universidad. Hemos entrevistado a Martí Ramos, coordinador territorial encargado del proyecto en la UAB, así como en todo el Vallès Occidental y Oriental, en la parte norte de la provincia de Barcelona, en la Universitat de Barcelona, en la Universitat Oberta de Catalunya, en l'Anoia y en el Berguedà.

22/06/2023

El proyecto Hedera, una iniciativa para romper barreras de acceso a la universidad

El proyecto Hedera es una iniciativa de Fundesplai, y consiste en crear una red de mentorías para acompañar a jóvenes en su camino hacia la universidad. Hemos entrevistado a Martí Ramos, coordinador territorial encargado del proyecto en la UAB, así como en todo el Vallès Occidental y Oriental, en la parte norte de la provincia de Barcelona, en la Universidad de Barcelona, en la Universitat Oberta de Catalunya, en el 'Anoia y en el Berguedà.

Hedera es un proyecto de investigación piloto que comienza en julio de 2022 a través del Ministerio de Inclusión y los fondos europeos Next Generation. El proyecto nace ante la preocupación del número de alumnos de ciertos entornos socioeconómicos que no acuden a la universidad o lo abandonan muy pronto. El coordinador del proyecto Martí Ramos señala que “se quiere analizar el impacto que la mentoría social puede tener en el período de tráfico entre segundo de bachillerato o segundo curso de CFGS en la siguiente etapa”. El proyecto también cuenta con una prueba piloto en Andalucía. Hedera tiene un convenio con la UAB, a través de la FAS, para trabajar conjuntamente la búsqueda de mentoras y mentores, así como los beneficios que supone (incluyendo el reconocimiento de créditos optativos).

De hecho, las dos principales investigadoras del proyecto de investigación tienen una larga vinculación con nuestra universidad: la Dra. Caterina Calsamiglia, Dra en Economía por la Universidad de Yale y profesora investigadora de la UAB entre 2005 y 2015; y la Dra. Annalisa Loviglio, Dra. en Economía por la UAB.

Actualmente, desde el proyecto, se trabaja con la voluntad de que haya suficientes mentores y mentoras como para atender a todo el alumnado que lo ha pedido, este objetivo es prioritario. Así, todos aquellos chicos y chicas que lo necesiten podrán tener una atención individualizada”.

Para realizar el estudio, se cuenta con la participación de 130 centros de toda Catalunya. A mitad de estos centros se les ha dado la oportunidad de ofrecer a sus alumnos de último curso de Bachillerato y de CFGS el acompañamiento de una persona mentora voluntaria. Evidentemente, dice, “el mayor objetivo es acompañar a los jóvenes en su entrada a la universidad”.

Se ha trabajado tanto con alumnado de bachillerato como de ciclos formativos de grado superior, pues desde aquí también pueden acudir a la universidad. Los propios alumnos deciden si quieren tener una persona mentora. Una vez que han dicho que sí, crean las parejas de mentoría buscando la mayor afinidad posible entre personas mentoras y mentoradas, a partir de los cuestionarios que han realizado tanto unos como otros. Ramos destaca que "la búsqueda de mentores y mentoras no se detiene, aunque el proyecto ya haya comenzado".

Las tareas de los mentores y mentoras podrían resumirse en un acompañamiento y guía en este proceso de cambio en el que se encuentra el alumnado, un momento de muchas dudas, como la nota o qué universidad escoger. La figura mentora recoge las inquietudes y acompaña por resolver las dudas y compartir experiencias

Las personas mentoras pueden ser de cualquier edad y deben estar cursando un grado universitario, máster, posgrado o tener el título universitario en España. "Una persona que haya estudiado toda su vida en México, por ejemplo, deberíamos mirar si puede ser un buen mentor o mentora porque no conoce el sistema de aquí", apunta Ramos.

Cabe destacar que la persona voluntaria también puede extraer beneficios de la mentoría y Ramos destaca tres. En primer lugar, el beneficio más inmediato es el reconocimiento de tres créditos ECTS, por aquellos que están cursando una carrera. En segundo lugar, es incluirlo en el currículum. “En carreras sociales interesa mucho y para la gente que debe presentarse a oposiciones, tener una mentoría permite sumar puntos extra”. En tercer lugar, la experiencia de realizar un voluntariado también es otro beneficio que extrae la persona mentora.

Cuando le preguntamos por las barreras de acceso a la universidad, Martí Ramos señala que “hay una barrera muy grande que es la económica. Hay una gran parte del alumnado que tienen la sensación de que no pueden acceder a las becas, y aunque haya subvenciones sigue siendo caro.

También existe una barrera social. Los chicos y chicas sin referentes familiares con estudios universitarios, como padres, tíos, hermanos… ya no van porque en su entorno ir a la universidad es algo que no se hace. Hay gente que no va a la universidad porque creen que no está hecha por ellos sino por otro tipo de clase social y eso debe limarse.

Después, existe una dificultad informativa para quienes no tienen el hábito de investigación y no tienen el asesoramiento. Hay institutos que lo trabajan mucho, pero en otros casos no es así. Como no existe una temática curricular destinada a la información, existe esta barrera informativa”.

Ramos anima a todo el que quiera a apuntarse como persona mentora y pide que “intenten recordar cómo estaban ellos en acabar el bachillerato, los exámenes, la selectividad… Que recuerden cómo el mundo se les echaba encima y piensen si les hubiera ido bien un acompañamiento”. En mi caso, "hice COU y entré una carrera que no quería hacer, me faltaba mucha información y pienso que hay muchos estudiantes que se encuentran en esta situación".

Para obtener más información e inscribirse como persona mentora en esta iniciativa, puede hacerlo a través de la web del proyecto Hedera.