25N: Visibilitzar la violència sexual

25 N

El 25 de novembre, Dia Internacional per a l’Eliminació de la Violència contra les Dones, serveix per recordar la necessitat de posar fi a una xacra social que afecta milers de dones arreu del món.

05/12/2024

La cuarta ola feminista se ha caracterizado por el protagonismo de la violencia sexual, tanto como demanda principal del movimiento como por la mediatización de casos notorios de violencia sexual, incluyendo figuras públicas. Este aumento de la visibilidad ha coincidido con un alza significativa en el número de denuncias de violencia sexual, lo que ha suscitado una pregunta clave: ¿este incremento refleja un aumento real de la violencia o una mayor predisposición de las víctimas a denunciar, una mayor intolerancia social, y en definitiva, un ambiente social más amable para denunciar? La respuesta a esta pregunta es clave, ya que nos dibuja dos panoramas muy distintos sobre el estado actual de la lucha contra la violencia de género. Con frecuencia, la falta de datos ideales ha sido un motivo para no profundizar en esta cuestión. Aunque es cierto que la información disponible es limitada, esta nos permite reflexionar y, en algunos casos, aporta evidencia que puede orientar una respuesta.

Antes de responder a esta pregunta, especifiquemos algunas de las fuentes de datos disponibles: las denuncias, los datos de atenciones hospitalarias de denuncias de agresiones sexuales, y los datos de encuesta. Cada uno de estos datos aporta una información valiosa, aunque también presenta sus propias limitaciones. Por ello, el enfoque más preciso y adecuado es combinar toda la información disponible.

Por un lado, existe evidencia sólida que apunta hacia un aumento de la predisposición a denunciar. Diversos indicadores como las encuestas, los datos de atenciones hospitalarias y el propio aumento de la denuncia, reflejan un avance en la disposición a exponer los hechos de violencia.

Sin embargo, al analizar la evolución de las formas más extremas de violencia, como las violaciones grupales, se observa un aumento que es menos probable que esté relacionado con cambios en la percepción social o predisposición a denunciar. Las violaciones con múltiples agresores han crecido de forma significativa en poco tiempo (un 54% de 2016 a 2022), lo cual indica un aumento de la violencia objetiva más allá de la mera disposición a denunciar.

Los datos de encuestas poblacionales como la Encuesta Catalana de Violencia Machista y la macroencuesta sobre la violencia contra las mujeres muestran una tendencia creciente de los episodios de violencia, incluso la no denunciada.

Por último, los datos de atenciones hospitalarias no solo reflejan un aumento en el número de casos, sino también un incremento en la gravedad de la violencia. Los hospitales están atendiendo a más víctimas que han sufrido un mayor grado de agresión física, lo cual sugiere que el nivel de violencia ejercida (no sólo de casos) está aumentando.

Estas tendencias nos sugieren que el aumento de denuncias y de la violencia objetiva no son hipótesis incompatibles; al contrario, parecen coexistir. Esto subraya la urgencia de generar datos de calidad sobre la violencia de género para entender mejor esta compleja realidad y, a su vez, poder formular respuestas más eficaces en la lucha por una sociedad libre de violencia.

Text de Leire Rincón, investigadora postdoctoral de la FCPS

Tots els detalls aquí: Análisis | Violencia sexual y datos: ¿se denuncia más o se violenta más? - El Salto - Edición General